“La empresa ni un milímetro ha querido mover su propuesta”, dijo Francisco Hernández Juárez, dirigente nacional del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (SRTM), respecto a que Teléfonos de México (Telmex) insiste en desaparecer las jubilaciones.
En el auditorio del organismo sindical en Puebla, el añejo dirigente, recordó el viernes que el planteamiento de la compañía es que los sindicalizados se retiren con el dinero ahorrado en sus cuentas de Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) más una aportación adicional de la parte patronal.
Los trabajadores, en teoría, se retirarían con 70 por ciento de su ingreso actual, pero Hernández Juárez estimó que cuando mucho sería con 50 por ciento.
De igual forma, manifestó que la empresa está condicionando cubrir las mil 942 vacantes pactadas en negociaciones pasadas, en tanto los sindicalizados no acepten modificaciones al Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
El dirigente indicó que la incorporación de esa cantidad de trabajadores costaría 400 millones de pesos y no 19 mil millones de pesos como ha dicho Telmex.
“La empresa llegó un momento en que dijo: no puedo dar vacantes si no revisan el tema de la jubilación… Una cosa es que la empresa pida y que nosotros queramos ayudar, y otra cosa es que diga; no te voy a dar tus vacantes si no aceptas lo que yo te estoy pidiendo”.
A decir de Hernández Juárez, se había tenido una relación de respeto con la parte patronal, pero ante esos condicionamientos, se está pasando a otro terreno, pues aseveró que se pretende que el STRM cargue con toda la responsabilidad.
Recordó que en 1990, cuando Telmex se privatizó, así como en 2004, la empresa alcanzó niveles que le permitieron ser ubicada como la mejor empresa telefónico del mundo, con una utilidad de más de 27 mil millones de dólares.
De manera repentina, abundó, se vino abajo y nunca tomó en cuenta el cumplir con las obligaciones que tenía con su personal sindicalizado.
Por el contrario, refirió, optó por trasladar los servicios que ofrecía Telmex a otras empresas, como Telcel.
Pero también pasó algunos edificios a América Móvil –también de Carlos Slim- y ahora esa empresa se los renta a Teléfonos de México a precios elevados.
Francisco Hernández Juárez sostuvo que Telmex pretende dar un “escarmiento” al sindicato, queriendo hacer notar que la jubilación es una “privilegio” que ya no tienen otros trabajadores en el país y que los telefonistas no merecen.
El dirigente añadió que de no alcanzar un acuerdo, tendrá que haber arbitraje de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, es decir que esta tendría que determinar si cubrir las casi 2 mil vacantes pendientes pondrían en riesgo el fondo de pensiones y jubilaciones, así como a la compañía.
En ese sentido, aseguró dicha dependencia está inclinada hacia la otrora paraestatal y a que los telefonistas consideren pasarse al esquema de las afores. /// La Jornada
Por: El Pulso Laboral