Trabajadores integrados por investigadores y académicos de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, constituidos en el nuevo Sindicato Independiente de Trabajadores Académicos (Sitaunicach), lograron la titularidad del Contrato Colectivo del Trabajo (CCT), al recibir prácticamente la totalidad de votos de los trabajadores y trabajadoras de esta importante casa de estudios”, así lo afirmó en exclusiva la doctora Esmeralda García Parra, secretaria general del nuevo sindicato independiente.
“Al demandar la titularidad del CCT el sindicato de nueva creación, el juez Carlos López Gallegos, del Juzgado Especializado en Materia Laboral, región 1 de Tuxtla Gutiérrez, dictaminó realizarse una votación libre y secreta el pasado 2 de septiembre del presente año entre todo el personal de la universidad, obteniendo prácticamente el total de los votos a favor, y con ello la titularidad. Después de 20 años de contar con un solo sindicato a modo y no reconocer a su actual dirigencia, investigadores, académicos y profesores decidieron organizarse y crear un sindicato independiente y democrático en una asamblea constitutiva el pasado 26 de junio de 2021; con la nueva reforma laboral, el día 10 de agosto del mismo año se obtuvo el registro del nuevo Sitaunicach”.
“A pesar de que los trabajadores sufrieron acoso, presión y amenazas por el sindicato demandado para que no se presentaran a votar, pues de lo contrario serían expulsados de su antiguo sindicato charro, pese a eso se tuvo una asistencia de 40 por ciento de la planilla de trabajadores de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, quienes prácticamente en su totalidad de los votos nos favorecieron”.
“Finalmente, quiero decirle a los compañeros que se encuentran en situaciones come estas que demos la oportunidad a la nueva reforma laboral, y para que la reforma se pueda materializar, nosotros tenemos que hacer nuestra parte para lograrlo”, consideró Esmeralda García, profesora e investigadora, ahora además líder del sindicato independiente Sitaunicach.
Por: Fernando Fuentes / El Milenio
