Después de la polémica provocada por la decisión de la mesa directiva del Senado de bajar el dictamen por el que se reforma la Ley Federal del Trabajo (LFT) para elevar los días de vacaciones, el dictamen quedó ya en primera lectura y con la posibilidad de ser votada en la sesión de este jueves.
Aprobada por las comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Estudios Legislativos Segunda, que presiden los morenistas Napoleón Gómez Urrutia y Rafael Espino, respectivamente, la iniciativa de reforma incrementa los días de asueto pagados de seis a 12 en el primer año de labores del trabajador y dos más anuales hasta llegar a 20 en un lustro.
En el dictamen se destaca que a nivel mundial, México es uno de los países en que más horas laboran los asalariados y menos horas de vacaciones disfrutan. Se menciona que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) establece como promedio de días de asueto 18, pero en el país es tres ve-ces menor.
La senadora Sasil de León, del PES, autora de una de las siete iniciativas que se dictaminaron, resalta que, “México se ubica como uno de los países del mundo con nivel mas bajo de vacaciones para su fuerza laboral y no sólo entre las naciones más prósperas, sino de las de similar grado de desarrollo. El promedio en América Latina es cercano a los 15 días, pero nos ubicamos al lado de China, Uganda, Filipinas, Nigeria, en que hay menos de nueve días de asueto.
Por su parte, la morenista Bertha Caraveo, quién presentó la iniciativa más reciente, denominada “vacaciones dignas”, advirtió que, de acuerdo con datos del IMSS, 75 por ciento de los mexicanos padece fatiga y estrés laboral por falta de descanso y se requiere una legislación que salde esa deuda con los trabajadores.
El pasado 19 de octubre circuló un documento en el que se acreditaba al coordinador de Morena, Ricardo Monreal, haber ordenado que el dictamen, que estaba ya en primera lectura, no se discutiera, éste rechazó el señalamiento y fue el presidente del Senado, Alejandro Armenta, quién asumió la responsabilidad y señaló que el aplazamiento era sólo por dos sesiones.
Salieron a relucir presiones de los empresarios para disminuir el aumento de vacaciones o posponerlo, pero el escándalo provocó que Armenta lo volviera a subir y apareciera en la Gaceta Parlamentaria entre los que pasarían a votación en la sesión de este jueves.
Está todavía por definir a partir de cuándo será su vigencia, ya que en el artículo primero transitorio del dictamen, se establece que “entrará en vigor el primero de enero de 2023 o al día siguiente de su publicación, si esta fuera en 2023”.
Igualmente, se señala en el segundo transitorio que la modificación se aplicará “a los contratos individuales o colectivos de trabajo vigentes a la fecha de su entrada en vigor, cualquiera que sea su forma o denominación, siempre que resulten más favorables a los derechos de las personas trabajadoras”.
Por: Andrea Becerril / La Jornada